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EDD. miércoles 03 de junio de 2020

Hoy, miércoles, 3 de junio de 2020

Primera lectura

Lectura de la segunda carta del san Pablo a Timoteo (1,1-3.6-12):

Pablo, apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, llamado a anunciar la promesa de vida que hay en Cristo Jesús, a Timoteo, hijo querido; te deseo la gracia, misericordia y paz de Dios Padre y de Cristo Jesús, Señor nuestro. Doy gracias a Dios, a quien sirvo con pura conciencia, como mis antepasados, porque tengo siempre tu nombre en mis labios cuando rezo, de noche y de día. Por esta razón te recuerdo que reavives el don de Dios, que recibiste cuando te impuse las manos; porque Dios no nos ha dado un espíritu cobarde, sino un espíritu de energía, amor y buen juicio. No te avergüences de dar testimonio de nuestro Señor y de mí, su prisionero. Toma parte en los duros trabajos del Evangelio, según la fuerza de Dios. Él nos salvó y nos llamó a una vida santa, no por nuestros méritos, sino porque, desde tiempo inmemorial, Dios dispuso darnos su gracia, por medio de Jesucristo; y ahora, esa gracia se ha manifestado al aparecer nuestro Salvador Jesucristo, que destruyó la muerte y sacó a la luz la vida inmortal, por medio del Evangelio. De este Evangelio me han nombrado heraldo, apóstol y maestro, y ésta es la razón de mi penosa situación presente; pero no me siento derrotado, pues sé de quién me he fiado y estoy firmemente persuadido de que tiene poder para asegurar hasta el último día el encargo que me dio.

Palabra de Dios

Salmo

Sal 122

R/.
A ti, Señor, levanto mis ojos

A ti levanto mis ojos,
a ti que habitas en el cielo.
Como están los ojos de los esclavos
fijos en las manos de sus señores. R/.

Como están los ojos de la esclava
fijos en las manos de su señora,
así están nuestros ojos
en el Señor, Dios nuestro,
esperando su misericordia. R/.

Evangelio de hoy

Lectura del santo evangelio según san Marcos (12,18-27):

En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, de los que dicen que no hay resurrección, y le preguntaron: «Maestro, Moisés nos dejó escrito: «Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero no hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano.» Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos; el segundo se casó con la viuda y murió también sin hijos; lo mismo el tercero; y ninguno de los siete dejó hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección y vuelvan a la vida, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete han estado casados con ella.»
Jesús les respondió: «Estáis equivocados, porque no entendéis la Escritura ni el poder de Dios. Cuando resuciten, ni los hombres ni las mujeres se casarán; serán como ángeles del cielo. Y a propósito de que los muertos resucitan, ¿no habéis leído en el libro de Moisés, en el episodio de la zarza, lo que le dijo Dios: «Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob»? No es Dios de muertos, sino de vivos. Estáis muy equivocados.»

Palabra de Dios

REFLEXIÓN. :

A la paz de Dios:

Hay cosas con las que no se juega. La resurrección es algo demasiado serio como para dejarlo en manos de cualquiera. No se puede entrar como un elefante en una cacharrería, porque pasa lo que pasa. Vino Jesús a traernos Vida y algunos se quieren burlar. Reírse de Él que hizo FE DE VIDA.

FE DE VIDA (LETRA y MÚSICA: J.M. SERRAT)

DESDE MIS OJOS QUE MIRAN, DESDE MIS MANOS QUE TOCAN,
DESDE MI LENGUA Y MI BOCA, DOY FE DE VIDA.
DE VIDA POR TODAS PARTES, DE VIDA POR DONDEQUIERA,
DE CUALQUIER MODO Y MANERA, A PESAR DE LOS PESARES.
VIDA, VIDA DE MI VIDA.
VIDA QUE DA VIDA.
VIDA, VIDA QUE APRESA,
VIDA QUE SE RIE,
VIDA QUE BESA.
VIDA BIENVENIDA,
VIDA QUE CONVIDA.
VIDA QUE DUELE,
VIDA QUE MATA,
VIDA QUE MUERE.
VIDA COMPAÑERA,
VIDA POR BANDERA
VIDA, VIDA, VIDA, VIDA, VIDA…
DESDE LOS SUEÑOS PENDIENTES
Y LOS FRACASOS CUMPLIDOS,
LA MEMORIA Y EL OLVIDO
DAN FE DE VIDA.
EN LAS LUCES Y EN LAS SOMBRAS,
CON SU MIEL Y SU VINAGRE,
A MI ESPEJO MISERABLE
VIENE A MIRARSE LA VIDA.

LA ANÉCDOTA

Los saduceos: el término deriva de Sadoc, sacerdote ligado a la historia de David y Salomón. Poco numerosos, pero con mucho poder, los saduceos pertenecían a la clase sacerdotal y a la nobleza laica. Se atenían a la letra de la Escritura Santa y a la autoridad de Moisés (precisamente por eso Jesús les argumenta así); no aceptaban la tradición oral de los fariseos como fuente de interpretación de la Escritura.

Partiendo de una interpretación ridícula de la ley del Levirato -Dt 25- (la viuda debe casarse con el hermano) quieren atacar a Jesús y su planteamiento sobre la resurrección. Y por ahí no pasa Jesús.

LA CATEGORÍA

Pasando de la anécdota a la categoría, podemos extraer algunas lecciones importantes.

Dios de vivos. Jesús acude al pasaje de Moisés en la zarza ardiendo. El “Dios de Abrahán, de Isaac y de Jacob” quiere la vida de todos sus hijos. “No es Dios de muertos, sino de vivos; porque para él todos están vivos”. Él quiere la vida de todos y cada uno de sus hijos. La Vida con mayúsculas, en condiciones. Porque Jesús ha resucitado la vida de los seres humanos tiene sentido. Y a partir de la resurrección de Jesús, la vida de los hombres y de las mujeres merecen la pena y, lo que es más importante, merecen la alegría.

Credo. La creencia en la vida que no tiene fin es uno de los elementos centrales de nuestra profesión de fe: “CREO EN LA RESURRECCIÓN DE LOS MUERTOS Y EN LA VIDA ETERNA”.

Vuestro hermano y amigo
Óscar Romano

Fuente : https://www.ciudadredonda.org/calendario-lecturas/evangelio-del-dia/hoy