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Comentario al evangelio de hoy sábado 17 de agosto de 2019

Del santo Evangelio según san Mateo 19, 13-15

En aquel tiempo, le presentaron unos niños a Jesús para que les impusiera las manos y orase por ellos. Los discípulos regañaron a la gente; pero Jesús les dijo: “Dejen a los niños y no les impidan que se acerquen a mí, porque de los que son como ellos es el Reino de los cielos”. Después les impuso las manos y continuó su camino.

Palabra del Señor.

Medita lo que Dios te dice en el Evangelio

«De los que son como ellos es el Reino de los cielos». Cuando yo era pequeño me acuerdo de que le pedía cosas a mis padres, las cuales debía llevar al colegio. Llegaba a mi casa hacia mi petición y después me ponía a jugar, realmente no sabía de donde salían las cosas que yo pedía, pero al otro día estaban allí, listas para llevar al colegio.

De esta es la confianza de la que hoy nos habla el Evangelio, de que seamos delante de Dios niños, que seamos los niños en brazos de su Padre y que jamás lo soltemos, pues con Él estaremos siempre seguros. O acaso ¿quién de nosotros no sentía seguro cuando estaban sus padres a su lado? ¡Cuánta más confianza y seguridad nos debe dar el estar con Dios Padre, nuestro Padre eterno!

Pero muchas veces es difícil ser hijo, y ¿qué me falta a mí para dejar ser a Dios mi Padre? Tantas veces nos aferramos en nuestras seguridades pasajeras mientras dejamos a un lado las seguridades eternas que nos ha prometido el Padre eterno.

Pidamos la gracia a María santísima que siempre vivió como una niña ante los hijos de Dios y así poder estar un día delante del Padre celestial.

«Dios es Padre, el más tierno de los padres, y desea la confianza de sus hijos. ¡Cuántas veces sospechamos de Él!, ¡sospechamos de Dios! Pensamos que puede enviarnos alguna prueba, privarnos de la libertad, abandonarnos. Pero esto es un gran engaño, es la tentación de los orígenes, la tentación del diablo: insinuar la desconfianza en Dios. María vence esta primera tentación con su heme aquí. Y hoy miramos la belleza de la Virgen, nacida y vivida sin pecado, siempre dócil y transparente a Dios».
(Homilía de S.S. Francisco, 8 de diciembre de 2018).

Fuente : http://es.catholic.net/op/articulos/73159/ser-ninos-delante-de-dios.html#modal