Comentario al evangelio de hoy jueves 29 de noviembre de 2018.
Del santo Evangelio según san Lucas 21, 20-28
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos: «Cuando vean a Jerusalén sitiada por un ejército, sepan que se aproxima su destrucción. Entonces, los que estén en Judea, que huyan a los montes; los que estén en la ciudad, que se alejen de ella; los que estén en el campo, que no vuelvan a la ciudad; porque esos días serán de castigo para que se cumpla todo lo que está escrito.
¡Pobres de las que estén embarazadas y de las que estén criando en aquellos días! Porque vendrá una gran calamidad sobre el país y el castigo de Dios se descargará contra este pueblo. Caerán al filo de la espada, serán llevados cautivos a todas las naciones, y Jerusalén será pisoteada por los paganos, hasta que se cumpla el plazo que Dios les ha señalado.
Habrá señales prodigiosas en el sol, la luna y las estrellas. En la tierra, las naciones se llenarán de angustia y de miedo por el estruendo de las olas del mar. La gente se morirá de terror y de angustiosa espera por las cosas que vendrán sobre el mundo, pues hasta las estrellas se bambolearán. Entonces verán venir al Hijo del hombre en una nube, con gran poder y majestad. Cuando estas cosas comiencen a suceder, pongan atención y levanten la cabeza, porque se acerca la hora de su liberación».
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio
El Evangelio del día te invita a confiar en Dios en los momentos difíciles. Muchas veces parece que todo está perdido y es ahí cuando la desesperación comienza a ganar terreno al implantar temor y desconfianza; basta que recordemos aquella frase que dice: «después de la tormenta viene la calma».Ciertamente vemos que el mundo convulsiona y que ya no hay remedio ante la inminente destrucción del planeta, de la familia – núcleo de toda sociedad -, de los valores morales, de la razón – cuántos países vemos que en vez de ayudar a las personas no las aceptan; asimismo, crean leyes que les reconocen sus desviaciones como legales, etc.-; en definitiva, vemos un mundo que no tiene remedio y que va camino a su propia destrucción …
Pero a pesar de lo mal que pinta el panorama, Jesús asegura que la liberación está cerca.Libres seremos pronto de enarbolar las banderas de la Verdad, del Amor, de la Paz y la Justicia; libres para caminar en santidad; libres para alcanzar la felicidad en plenitud.
Que san José y la Virgen María te guíen en este valle de lágrimas para que, junto a ellos, alcances la libertad que Dios promete.
El Evangelio, que en tiempo de pruebas da fuerza y alma a la lucha por la liberación, en el tiempo de la libertad es luz para el viaje diario de las personas, familias, sociedades y es la sal que da sabor a la vida ordinaria y la preserva de la corrupción de la mediocridad y de los egoísmos.
(S.S. Francisco, 26 de septiembre de 2018)
Fuente : http://www.es.catholic.net/op/articulos/71840/la-libertad-esta-cerca.html#modal