Comentario al evangelio de hoy viernes 14 de octubre de 2016
La fe sólo vale cuando se toma en serio.
Viernes XXVIII del tiempo ordinario. Ciclo C.
Nada hay oculto que no haya de saberse
Por: H. Javier Castellanos LC.
Por: H. Javier Castellanos LC.
Fuente: http://es.catholic.net/op/articulos/63531/la-fe-solo-vale-cuando-se-toma-en-serio.html
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, creo en Ti, pero te pido que fortalezcas mi fe. Tú conoces mi debilidad, y todas las ocasiones que me da miedo creer en Ti sin condiciones. Hoy me pongo en tus manos. Pase lo que pase, confío en Ti y te amo. Así sea.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Lucas 12, 1-7
En aquel tiempo, la multitud rodeaba a Jesús en tan gran número, que se atropellaban unos a otros. Entonces Jesús les dijo a sus discípulos: “Cuídense de la levadura de los fariseos, es decir, de la hipocresía. Porque no hay nada oculto que no llegue a descubrirse, ni nada secreto que no llegue a conocerse. Por eso, todo lo que ustedes hayan dicho en la oscuridad, se dirá a plena luz, y lo que hayan dicho en voz baja y en privado, se proclamará desde las azoteas.
Yo les digo a ustedes, amigos míos: No teman a aquellos que matan el cuerpo y después ya no pueden hacer nada más. Les voy a decir a quién han de temer: Teman a aquel que, después de darles muerte, los puede arrojar al lugar de castigo. Se lo repito: A él sí tienen que temerlo.
¿No se venden cinco pajarillos por dos monedas? Sin embargo, ni de uno solo de ellos se olvida Dios; y por lo que a ustedes toca, todos los cabellos de su cabeza están contados. No teman, pues, porque ustedes valen mucho más que todos los pajarillos”.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
Los fariseos por fuera aparentaban algo, pero por dentro eran otra cosa. Se decían justos y observaban la ley, pero en el fondo sólo buscaban sus intereses. Cristo, en el Evangelio de hoy, nos previene de una doble vida, de llamarnos cristianos sin seguirlo de veras.
Lo contrario a la hipocresía es la coherencia de vida. Una persona coherente tiene convicciones firmes por dentro que se manifiestan en decisiones por fuera. Si realiza una buena acción, lo hace sin pensar en otros intereses o en dar una buena imagen.
Un cristiano coherente vive su fe por fuera y por dentro. Es alguien de una sola pieza y, si se considera seguidor de Cristo, lo hace con todo su corazón, en las buenas y en las malas. Ser cristiano así puede dar miedo. Es un camino exigente, y la cruz está siempre incluida. Incluso hoy en día hay muchos cristianos en la cárcel, torturados o que mueren por su fe. Creer en Cristo nunca ha sido fácil. Pero Dios vale la pena y la confianza. Él se merece un amor auténtico, valiente, en serio.
“La coherencia en la vida, entre la fe y el testimonio. Aquí debemos ir adelante y realizar en nuestra vida esta coherencia cotidiana. Este es un cristiano, no tanto por lo que dice, sino por lo que hace. Por la forma en la que se comporta, esta coherencia que nos da vida. Y es una gracia del Espíritu Santo que debemos pedir”. (Homilía de S.S. Francisco, 9 de noviembre de 2014).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Rezaré un misterio del rosario pidiendo por aquellos cristianos perseguidos por su fe.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.
Cristo, Rey nuestro. ¡Venga tu Reino!
Oración preparatoria (para ponerme en presencia de Dios)
Señor, creo en Ti, pero te pido que fortalezcas mi fe. Tú conoces mi debilidad, y todas las ocasiones que me da miedo creer en Ti sin condiciones. Hoy me pongo en tus manos. Pase lo que pase, confío en Ti y te amo. Así sea.
Evangelio del día (para orientar tu meditación)
Del santo Evangelio según san Lucas 12, 1-7
En aquel tiempo, la multitud rodeaba a Jesús en tan gran número, que se atropellaban unos a otros. Entonces Jesús les dijo a sus discípulos: “Cuídense de la levadura de los fariseos, es decir, de la hipocresía. Porque no hay nada oculto que no llegue a descubrirse, ni nada secreto que no llegue a conocerse. Por eso, todo lo que ustedes hayan dicho en la oscuridad, se dirá a plena luz, y lo que hayan dicho en voz baja y en privado, se proclamará desde las azoteas.
Yo les digo a ustedes, amigos míos: No teman a aquellos que matan el cuerpo y después ya no pueden hacer nada más. Les voy a decir a quién han de temer: Teman a aquel que, después de darles muerte, los puede arrojar al lugar de castigo. Se lo repito: A él sí tienen que temerlo.
¿No se venden cinco pajarillos por dos monedas? Sin embargo, ni de uno solo de ellos se olvida Dios; y por lo que a ustedes toca, todos los cabellos de su cabeza están contados. No teman, pues, porque ustedes valen mucho más que todos los pajarillos”.
Palabra del Señor.
Medita lo que Dios te dice en el Evangelio.
Los fariseos por fuera aparentaban algo, pero por dentro eran otra cosa. Se decían justos y observaban la ley, pero en el fondo sólo buscaban sus intereses. Cristo, en el Evangelio de hoy, nos previene de una doble vida, de llamarnos cristianos sin seguirlo de veras.
Lo contrario a la hipocresía es la coherencia de vida. Una persona coherente tiene convicciones firmes por dentro que se manifiestan en decisiones por fuera. Si realiza una buena acción, lo hace sin pensar en otros intereses o en dar una buena imagen.
Un cristiano coherente vive su fe por fuera y por dentro. Es alguien de una sola pieza y, si se considera seguidor de Cristo, lo hace con todo su corazón, en las buenas y en las malas. Ser cristiano así puede dar miedo. Es un camino exigente, y la cruz está siempre incluida. Incluso hoy en día hay muchos cristianos en la cárcel, torturados o que mueren por su fe. Creer en Cristo nunca ha sido fácil. Pero Dios vale la pena y la confianza. Él se merece un amor auténtico, valiente, en serio.
“La coherencia en la vida, entre la fe y el testimonio. Aquí debemos ir adelante y realizar en nuestra vida esta coherencia cotidiana. Este es un cristiano, no tanto por lo que dice, sino por lo que hace. Por la forma en la que se comporta, esta coherencia que nos da vida. Y es una gracia del Espíritu Santo que debemos pedir”. (Homilía de S.S. Francisco, 9 de noviembre de 2014).
Diálogo con Cristo
Ésta es la parte más importante de tu oración, disponte a platicar con mucho amor con Aquel que te ama.
Propósito
Proponte uno personal. El que más amor implique en respuesta al Amado… o, si crees que es lo que Dios te pide, vive lo que se te sugiere a continuación.
Rezaré un misterio del rosario pidiendo por aquellos cristianos perseguidos por su fe.
Despedida
Te damos gracias, Señor, por todos tus beneficios, a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos.
Amén.
¡Cristo, Rey nuestro!
¡Venga tu Reino!
Virgen prudentísima, María, Madre de la Iglesia.
Ruega por nosotros.
En el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.